Loeb se clasificó sexto de la general después que, al ser el primero en el orden de salida, tuviera que quitar la nieve acumulada en la pista, el primer día de rallye. También perdió tiempo por un pinchazo. Su compañero de equipo, Sebastien Ogier, se clasificó cuarto, y Petter Solberg quinto con el DS3 WRC.
Sin embargo, entre ellos ganaron 9 tramos de los 22 totales, en una prueba que tradicionalmente ha favorecido a sus rivales del equipo Ford, que en esta ocasión monopolizaron las tres posiciones de podio.
"Terminamos el rallye y esto está bien", afirma Loeb, siete veces Campeón del Mundo. "Estoy orgulloso de haber llegado hasta el final porque ha sido un rallye muy largo y complicado. También estoy contento con el coche, aunque no hemos logrado un resultado demasiado bueno".
Ogier y Loeb demostraron el potencial del DS3 WRC con la primera y segunda posición en el 'Power Stage', que premiaba con puntos extra a los tres primeros clasificados y transmitido por televisión en todo el mundo.
"Estoy orgulloso de mi resultado porque esta era la segunda vez que competía en Suecia", comenta Ogier. "Podemos extraer cosas muy buenas de este rallye. A pesar de las dificultades, hemos demostrado que el Citroën DS3 WRC es rápido. Ya tengo muchas ganas de disputar rallyes de tierra porque creo que el coche rodará muy bien en esta superficie".
El director de Citroën Racing, Olivier Quesnel, resumió las hazañas del equipo en el Rallye de Suecia: "En su primera carrera, el Citroën DS3 WRC demostró ser competitivo y efectivo durante los tres días. Antes de empezar sabíamos que nosotros no éramos los favoritos en esta superficie. Tenemos que esperar a los primeros tramos de tierra para hacernos una idea más acertada de su potencial".
La última vez que un piloto de Citroën no logró un podio fue en Suecia, el febrero de 2008. La primera plaza de la carrera fue para Jari-Matti Latvala, la segunda para Mikko Hirvonen y la tercera para Gigi Galli, todos pilotos de Ford.
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